John Burningham, el autor e ilustrador de niños detrás de algunos de los libros para niños más perdurables del siglo XX, murió a la edad de 82 años.
El escritor y artista murió el viernes, 4 de enero, después de contraer neumonía, según confirmó su agente literario el lunes.
Burningham, quien el año pasado recibió de manera conjunta un premio a los logros de toda la vida de la organización benéfica para niños Booktrust con su esposa y su ilustradora Helen Oxenbury , escribió e ilustró docenas de libros, entre ellos "Husherbye, Avocado Baby", inspirado en su hija más joven, cuya comida favorita era el aguacate - "Granpa and Oi! Get Off Our Train."
En una declaración, su familia dijo: "Creemos que hemos perdido a un esposo, padre y abuelo verdaderamente maravilloso y original, que nos inspiró, nos sorprendió y nos exasperó en igual medida".
“John fue un verdadero original, un pionero del libro de imágenes y un creador de historias sin fin inventivo que podría ser divertido y reconfortante, impactante y juguetón. Nunca se dirigió a los niños, siempre los trató con el mayor respeto ”, dijo Francesca Dow, directora general de Penguin Random House Children's. Ella agregó: "John será muy extrañado por su familia editora aquí en Penguin Random House, y nuestros pensamientos y nuestros mejores deseos están con Helen y su familia".
“Nadie crea un álbum ilustrado más perfecto que John Burningham. Su escritura es conmovedora, divertida y profunda; sus ilustraciones son obras de arte ", dijo Lauren Child, laureada de niños, cuando Burningham ganó el premio Booktrust en 2018. En ese momento, la autora e ilustradora Polly Dunbar también elogió sus pinturas como" brillan como días felices y nebulosos de la infancia ... me dan ganas de correr descalzos, afuera, después de oscurecer ".
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