Los hermanos Juan y Alejandro Mingarro, las cuatro manos que crean con talento y mucho sentido del humor las ilustraciones del Estudio Brosmind, eran dos niños de la década de los ochenta que crecieron en la que consideran "la edad de oro del entretenimiento infantil". Rodeados de Game Boys, relojes Casio, Regreso al futuro ySuper López, esperaban con ansia el mundo futurista que anunciaba la llegada de año 2000. Pero la fecha pasó y todo seguía siendo igual de cutre. "Queríamos que nuestra vida fuera tan increíble como en esos universos, pero crecimos en un pequeño pueblo de Huesca en un ambiente muy diferente", recuerdan durante su visita al festival de diseño Pictoplasma.
Allí es donde siendo niños crearon con lápiz y papel tebeos como Super Peatón, Rambon o Hiron-Man con los que creían que les llegaría la fama y riqueza. Luego lo intentaron inventando juguetes (en realidad "customizaban" sus G.I. Joe) y más tarde con los Mingarro Films, unas surrealistas películas caseras que aprovechaban los escasos efectos digitales de la época para crear historias de acción y ciencia-ficción.
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