'Vida y muerte' inspiran al arte urbano en la Cripta del Centro de Historias


La dicotomía entre la vida y la muerte, un tema sustancial en la historia del arte, ocupa desde ya y hasta el 9 de diciembre la Cripta del Centro de Historias de Zaragoza. Esta vez son cuatro artistas urbanos de muy diferentes estilos, provenientes del mundo de la ilustración, el tatuaje o la arquitectura -los zaragozanos Chikita, Danjer y Peroo y otra, de adopción ,la tinerfeña RdRio-, quienes han trabajado in situ durante mes y medio en el espacio cóncavo del edificio de la plaza de San Agustín para crear un ambiente inmersivo, con cuatro obras de gran formato, tridimensionales, que, a modo de instalación, mezclan madera troquelada, los juegos de luces y la pintura.

La exposición, titulada 'Vida y muerte', se completa con una serie de cuadros de cada uno de los artistas que giran asimismo en torno a este asunto y que se disponen de manera más tradicional en la antesala de la Cripta. En las obras predomina una perspectiva conceptual y estética de la vida y la muerte que entronca más con lo popular (al modo en el que lo hace la cultura mexicana) que con lo oscuro y lo trágico. Se trata de subrayar las dos caras de una misma moneda: cómo la vida no se entiende sin la muerte y viceversa. Las dos mujeres del quipo, ambas madres, se asoman en la Cripta a la parte más luminosa, la de la vida. Mientras que ellos han convertido en arte su idea de la muerte. RdRio es una arquitecta especializada en 'lettering' que tiene la botánica como hilo conductor de su obra. Chikita, por su parte, como sucede con Danjer, es una vieja conocida del arte urbano en Zaragoza (con algunos murales que forman parte ya del paisaje de la ciudad, como el del solar del Coso bajo). En cuanto a Peroo, aporta a 'Vida y muerte' lienzos abstractos de aire surralista, además de una gran calavera que comparte espacio con la de Danjer en la cripta. Un audiovisual se encarga de añadir información sobre todo el proceso de realización de las cuatro obras de la Cripta.

A la presentación acudió la vicealcaldesa y concejal de Cultura Sara Fernández junto al gerente de Zaragoza Cultural, David Lozano.



Comentarios