Amigas, amigos,
Dice Castoriadis, en Thucydide, la force et le droit que el asunto del problema del intercambio en la sociedad no tiene por qué limitarse a lo económico, sino que, idealmente, se podría pensar en “una organización de la sociedad de manera que lo que cada uno crea o produce esté, en la mayor medida de lo posible, disponible para el mayor número de personas, en las mejores condiciones posibles”.
El 1 de noviembre, La CALA cumple 15 años en Chodes, y nos reconocemos en el ideal formulado por Castoriadis, junto a otras muchas personas, colectivos, organizaciones, instituciones que piensan y actúan de la misma manera. Felizmente no somos una excepción, ni una rareza.
Será el primer aniversario sin convocatoria de fiesta en la que disfrutar de los frutos del valle, de las sonrisas de aquí y allá, de las conversaciones enredadas.
Afortunadamente, la palabra celebración no agota su significado en el acto festivo, y podemos volver a celebrar un año más que esta casa ha estado y estará Abierta.
El paréntesis del cierre físico lo estamos llenando de nuevas producciones que pronto serán públicas.
Ahora, esbozamos una sonrisa para recordar que el lema elegido para 2020 fue “tenemos tiempo”, y en 2019: “poco miedo”. Se entiende la sonrisa.
Para 2021 hemos elegido una pregunta, no es pregunta con respuesta incorporada, ni pregunta sin salida; hemos elegido una pregunta que, por ser algo, es inconformista, esta:
“¿Y?”
El propósito es bien sencillo, cada vez que escuchemos en boca de otro, o en la propia, un lugar común, una afirmación vacía de sentido, una proclama demagógica, cada vez que alguien (o nosotros) utilicemos el titular mediático, el aforismo repetido, el emoticono de tres o más sílabas, no nos conformaremos y plantearemos (nos plantearemos) la pregunta: “¿Y?”.
No es una pregunta sobre el futuro, no es un grito frente a la incertidumbre; es una pregunta sobre lo que acabamos de escuchar o leer, de decir o escribir, es una pregunta sobre lo dicho y lo escrito, sobre el pasado.
Si, como intuimos, vamos a vivir una temporada más o menos larga instalados en el lenguaje que sustituye a los hechos, vamos a acomodar el espacio para que entre la luz y corra el aire.
Queremos daros las gracias a ponentes invitados, participantes en nuestras actividades, empresas e instituciones colaboradoras, periodistas, ciudadanía, que os habéis hecho presentes durante doce meses por medios físicos y virtuales. En un año donde la compañía era tan importante, nos hemos sentido muy acompañados.
Despedimos este primer saludo de nuestro año 2021, con un recuento de hechos en 2020, circunscritos a la relación virtual durante el periodo de confinamiento exigido por el estado de alarma y extendidos a lo presencial durante el resto del año:
_ Un título nuevo en Biblioteca La CALA, Esto no es un cartel, de Isidro Ferrer, y la digitalización de El París, de Grassa Toro.
_ Tres exposiciones: Lugares comunes, con Natalia Royo. Los invisibles, con Isidro Ferrer. Una biblioteca propia, con Mariona Martínez Dorado.
_ Inicio del nuevo programa Residencia Abierta Escrita, en el que han participado: Jorge Caraballo, Micaela Chirif, Ina Olvera.
_ Cursos presenciales y virtuales: La invención del recuerdo, Maneras de leer, Escribir son
cuatro cosas, La piel del muro.
_ Sesiones del ciclo Casi lecciones, invitados: el físico Vicente Alcober Bosch y el artista Jaime Serra.
_ Proyección de El tercer acto, de Pep Carrió, Aitana Carrasco, Diego Fermín y Grassa Toro.
_ Creación de materiales didácticos para la Red de Bibliotecas Públicas de la provincia de Huesca.
_ Colaboraciones con Festival Catabumba de Godella, Palacio Quintanar de Segovia, Teatro Arbolé de Zaragoza, La Particular, la Dead Puppet Orchestra.
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Está todo preparado para inaugurar algún día
EL RECURSO DEL MéTODO
Dibujos pintados por Gonzalo Ferreró
La CALA 2021: ¿Y?
Un saludo cordial,
Grassa Toro & Ana Mareca
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