El black metal en Noruega, un camino directo al infierno
El dibujante Magius narra con humor y estética infantil la trágica degeneración del género musical en el país nórdico
Poseedor de un estilo barroco, evocador, cómico, detallista e iconoclasta, el dibujante Magius le ha dado la vuelta en su último álbum, Black Metal (Autsaider Cómics), a la historia en Noruega del género musical que lo titula. Las envidias en cualquier entorno artístico son normales, pero en el black metal del país escandinavo las puñaladas fueron literales. Hubo muertos, decenas de iglesias quemadas y una falsa secta que no era más que un picadero en los bajos de una tienda de discos en Oslo.
Los protagonistas de esta historia fueron Pelle Ohlin (Dead), Øystein Aarseth (Euronymous), Bård Eithun (Faust) y Kristian Vikernes (Varg, Count Grishnackh), un grupo de chicos de entre 17 y 25 años. A finales de los ochenta los que no podían satisfacer sus inquietudes en la prensa mayoritaria lo hacían a través de fanzines y correspondencia. Así fue como Dead conoció a Euronymous, quien buscaba nuevo vocalista para el grupo Mayhem. El estilo vocal único de Dead, unido a su arriesgada puesta en escena, hizo que su (breve, pues se suicidó en 1991) carrera llamara la atención de los medios especializados. Los conciertos de Mayhem incluían automutilación, cabezas de cerdos clavadas en picas y loas al Maligno. En realidad era solo ir un poco más lejos de lo que habían ido ya Black Sabbath, Kiss o Screamin' Jay Hawkins
Fuente: El Pais
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